Hoy hace 3 años murió mi hermana, la belleza que poseía era envidiable, ella siempre fue un modelo a seguir a falta de mi madre que apenas recordaba, ella se fue de este mundo cuando un loco al volante choco y se llevo con ella la vida de mi hermana.
Nuestra familia se componía de dos personas, ella y yo, ella sin duda era la cabeza de la familia así que para cuando llego ese horrible día yo a penas con mayoría de edad pase a tener una familia conformada solo por mi, a pesar de todo nunca me sentí sola, siempre me sentí en compañía de mi hermana, inclusive hoy en día despierto en la mañanas, cuando me levanto siento como si ella aún me diera los buenos días, el día de hoy prepare un ramo de flores que pondré en su lugar de reposo.
Antes de ir, me demoro un rato y paso al parque que visitábamos cuando era más pequeña para jugar, en la entrada veo una joven casi de mi misma edad vendiendo galletas, se acerca y me ofrece su producto, aún no había comido, así que acepto. No había mucha gente así que me senté en una de las tantas bancas vacías.
Junto al lago veo una linea de una mujer muy hermosa, viniéndome a la mente mi querida hermana, porta un sombrero algo estorboso y ropa muy ligera que encaja con la suavidad de los movimientos. Por pura curiosidad me acerco a ella esperando tener la oportunidad de ver su rostro, cuando escucho de ella con una voz muy dulce decir mi nombre, ¿por que conoce mi nombre?.
-¿Hace tres años que me he marchado y a penas vienes a visitarme?, ¿acaso no me haz extrañado?, yo siempre te recuerdo y te mantengo en mi mente y corazón-
Me quede atónita, me quede inmobil y no pude separar mi vista de aquel sombrero blanco y lo único que pude decir fue:
-¿her...mana?-
-¿quien más?, que, ¿acaso ya te olvidaste de mi?-
- no, solo estoy sorprendida-
-me alegro que por fin hayas podido encontrar el lugar donde perecí, por que he querido contarte la verdad desde hace tiempo-
Como puede ser posible, esto es un error, seguramente se equivoco de persona y ahora esta contando sus secretos al a persona equivocada.
-¿la verdad?, pero tu fuiste atropellada -
- no, ese día el ultimo cumpleaños contigo, vine aquí al atardecer por ordenes de un abogado de nuestro padre, el cual había fallecido y nos había dejado una herencia incalculable-
Nuestro padre.... pensé, yo nunca había querido saber nada de un padre.
-Nosotras somos hijas ilegitimas de nuestro padre, el cual es un hombre acaudalado que daño la moral de nuestra madre, la cual la mantuvo como empleada domestica en su mansión por el día y su amante por la noche-
Pero desde que recuerdo siempre hemos vivido humildemente , por que no recuerdo nada de esto.
-Cuando yo nací, simplemente me encerró en una casa de campo que tenia en sus tierras y nunca me dejo salir, cuando tu naciste y nuestro padre se entero de que tu venias en camino y exploto en furia, corriendo a mi madre y a mi, sin un peso en el bolsillo y con la amenaza de que jamas retornara a la mansión-
Jamas tuve necesidad por preguntar acerca de mi padre, pues tenia todo el cariño que pudiera recibir de mi hermana, ella seguramente habían sufrido demasiado anteriormente y jamas lo expresó ni con una lagrima o un sollozo.
-¿por que jamas me lo dijiste?, ¿por que me lo ocultaste?-
- Querida hermana, para que atormentarte cuando aún eras muy joven para saber la verdad, pero la verdad es que después de enterarse nuestros medios hermanos del arrepentimiento de nuestro padre a nuestra madre al darle su herencia a sus hijas ilegitimas, yo palidecí frente a personas de nuestra sangre, aquí mismo-
Tenemos más familia, familia la cual nos odia, y ellos son los que mataron a mi hermana, que esta sucediendo... en mi mente todo esta dando vueltas, mis lagrimas ruedan por mis mejillas y no entiendo que es lo que pasa, mis piernas débiles hacen que me arrodille al suelo, la impresión no me deja estar de pie.
-¿Por que estas aquí?
-Por que al igual que yo estas por palidecer por nuestra sangre, sangre que te ha seguido desde mi muerte hasta hoy, que es tu cumpleaños y has cumplido la edad que estipulaba el testamento para poder heredar todo-
- ¿Que quieres decir?- respondí con una voz tan agitada manteniendome arrodillada y mi cabeza dando vueltas
Ella volteo a mi rostro, era ella, era mi hermana.
-He venido por ti, para ir con nuestra madre-
Ella acerco su mano suavemente a mi rostro y me beso la mejilla, era mi hermana, cuanto había extrañado esos besos de buenas noches, era ella quien me había cuidado en mis peores días y mi mejor amiga en los dilemas de la noche, su rostro resplandecía igual que siempre. En mis últimos alientos lo único que puedo decir es:
-Gracias por venir por mi-
La vendedora de galletas en el ocaso se acerca al cuerpo de apariencia adormilada de la chica y solo la arroja al lago de manera discreta, rodeada del manto nocturno.